Gastronomía: Pastel de cumpleaños especial

Un día, mientras me paseaba por los vastos mundos de Internet buscando algo sobre chocolate, me crucé con esta receta de cheesecake y se me hizo la luz. Resulta que a Esposo™ le encantan los frutos secos, especialmente los anacardos y los cacahuetes, así que sabía que una tarta como esta, con mantequilla de cacahuete, le iba a encantar, y aunque era abril y su cumpleaños es en julio, me guardé la página para poder hacérsela el día de su cumpleaños.

Como ya sabéis, Esposo™ siempre se apunta a un bombardeo cuando le planteo ideas descabelladas, como hacer una ensalada cubo Rubik. Siempre que me apetece hacer algo o pienso en cómo puedo hacer algo, ahí está él para pensar conmigo y aportar todas sus ideas ingenieriles. Da igual si es sobre cocina, sobre fotografía o sobre cómo montar dos estanterías en el despacho, él siempre está ahí. Es muy agradable que cuando se te ocurren cosas la persona que tienes al lado te quiera ayudar a conseguirlas sin pensárselo dos veces.

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Por esa razón Esposo™ se merece un pastel de cumpleaños genial, aunque lleve mucha preparación y esfuerzo. La verdad es que cuando pruebas esta tarta, te da bastante igual que te tuvieras que poner a hacerla el día anterior (porque tiene mucho rato de enfriado en nevera), el sabor es espectacular, y además el efecto en los invitados fue instantáneo, porque es una tarta que impresiona mucho tanto por fuera como al cortarla, con ese marmoleado tan bonito que se le queda.

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Eso sí, agarraos los machos, porque una sola porción ya te deja con un subidón tremendo de azúcar para toda la semana. Yo, con mucha pena en mi corazón, le tuve que decir a Esposo™ que se la llevara al día siguiente a la oficina, porque sabía que si se quedaba en casa no iba a durar ni dos asaltos. Al final pasó lo mismo, porque se la llevó y esa misma tarde volvió a casa con el plato  sin ningún resto ( y eso que se llevó algo más de media tarta)

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Coincidió que este año su cumpleaños caía en domingo, así que pudimos invitar a gente a casa y celebrarlo en el mismo día. Tuvimos una tarde la mar de agradable y divertida, con muchas risas y también con Cumpleaños feliz cantado en inglés y en español. Lo que sí fue un desafío fue hacer la tarta con él en casa y que fuera un poco sorpresa, pero bueno, aunque vio la tarta varias veces no se imaginó hasta que la probó que era con mantequilla de cacahuete.

Cheesecake de chocolate y cacahuete

    

July 30, 2017

  • Preparación: 1 hr
  • Cocinado: 1 hr 45 mins
  • 1 hr

    1 hr 45 mins

    2 hrs 45 mins

  • Produce: 1 cheesecake de 27 cm. de diámetro

Ingredientes

Para la base

200 gr. de galletas de chocolate (tipo Oreo, Digestive, etc.), molidas en polvo.

30 gr. de azúcar

50 gr. de mantequilla derretida

Spray antiadherente o mantequilla a temperatura ambiente

Para el cheesecake

115 gr. de chocolate para fundir del 50% de intensidad

900 gr. de queso crema, tipo Philadelphia, a temperatura ambiente

290 gr. de azúcar superfina

Un pellizco pequeño de sal gorda

1 tsp. (cucharadita) de extracto de vainilla

4 huevos medianos, a temperatura ambiente

1/2 cup (taza) de mantequilla de cacahuete sin tropezones

Para el glaseado

220 gr. de chocolate para fundir intenso (70%)

85 gr. de mantequilla, cortada en cubitos.

30 ml. de leche entera, a temperatura ambiente

10 ml. de miel suave (acacia, por ejemplo)

Cacahuetes picados (opcional)

Indicaciones

Para la base

Precalentamos el horno a 160ºC.

Envolvemos el molde de nuestra elección en papel aluminio, tanto el fondo como los bordes exteriores. Engrasamos el interior con spray antiadherente de cocina o con mantequilla a temperatura ambiente.

Cortamos un círculo de papel de horno con el diámetro de nuestro molde (con un lápiz hacemos la silueta del molde y luego recortamos).

Colocamos el círculo de papel de horno en el interior del molde envuelto y lo engrasamos también.

Mezclamos las galletas bien molidas con la mantequilla, y distribuimos la mezcla en el molde, apretando para que quede todo cubierto y uniforme.

Horneamos durante 10 minutos o hasta que la base esté firme y dura.

Dejamos que se enfríe completamente fuera del horno.

Para el cheesecake

Derretimos el chocolate para fundir al baño María (en un cuenco sobre un cazo con agua caliente). Dejamos enfriar.

Mientras tanto, en un procesador de cocina o con varillas de batir eléctricas, batimos el queso crema a velocidad media durante 3 minutos, o hasta que esté ligeramente esponjoso.

Bajamos a velocidad baja, y agregamos el azúcar en una corriente constante y lenta, hasta que el azúcar esté bien combinado con el queso.

Una vez el azúcar esté bien integrado, agregamos un pellizco de sal gorda y una cucharadita de extracto de vainilla, y esperamos hasta que todo esté bien integrado (siempre a velocidad baja) y haya quedado una mezcla semilíquida y homogénea.

Agregamos los huevos a temperatura ambiente uno a uno, en cuanto esté integrado uno (un par de minutos), agregamos el siguiente sin esperar, no hay que mezclarlos de más.

Dividimos la mezcla de queso en dos cuencos grandes. Saldrán aproximadamente dos cuencos de entre 500 y 600 gr. de peso.

En uno de los cuencos, agregamos el chocolate fundido (que debe estar COMPLETAMENTE frío) y mezclamos con varillas normales, hasta que esté integrado todo. En el otro cuenco, agregamos la mantequilla de cacahuete y lo mezclamos siguiendo el mismo procedimiento.

Montaje

Sobre la base que cocinamos al principio, agregamos dos cazos de servir de la mezcla de mantequilla de cacahuete. Agitamos ligeramente el molde para que se esparza la mezcla por toda la base. Sobre la mezcla de mantequilla de cacahuete, agregamos dos cazos de servir de la mezcla de chocolate y volvemo a agitar para que se distribuya. Aún veréis la mezcla de mantequilla de cacahuete por los bordes, esto es normal. Pasamos a mezclar cazos de servir de uno en uno, alternando entre las dos mezclas y siempre agitando un poco tras cada incorporación para que se mezcle un poco todo. Repetimos hasta agotar los dos cuencos de mezcla.

Pon una buena cantidad de agua a hervir (unos 2 litros y medio)

Coloca el molde con la tarta dentro de una fuente grande para asados.

Cuando el agua esté hirviendo, con mucho cuidado viértela en la fuente para asar, hasta que llegue a la mitad de la altura del molde.

Mete el conjunto de fuente y molde dentro del horno y cocina durante 1 hora y 20 minutos, o hasta que los bordes de la tarta estén firmes, pero el centro todavía esté ligeramente tambaleante.

Saca el cheesecake de la fuente, y déjalo enfriar a temperatura ambiente.

Cuando esté completamente frío, mételo en la nevera durante al menos 6 horas.

Para el glaseado

ATENCIÓN: este glaseado no debe refrigerarse, ni se puede preparar con mucha antelación, se usa en el momento. Se puede hacer hasta una hora antes de servir la tarta.

Fundimos el chocolate intenso junto con los cubitos de mantequilla al baño María, mezclando de vez en cuando con una paleta flexible de silicona para integrarlos.

Una vez todo esté fundido y homogéneo, sacamos del fuego, y agregamos la leche y la miel. Al principio estarán todos los elementos separados, esto es normal. Con la paleta flexible de silicona vamos mezclándolos hasta que queden completamente integrados. Quedará un glaseado ligeramente brillante y espeso.

Montaje final

Vertemos el glaseado por encima de la tarta y con una paleta distribuimos por la superficie, dejamos que caiga por los lados de la cheesecake.

Si lo deseamos, espolvoreamos cacahuetes groseramente picados por el borde exterior de la tarta.

Adaptado de la receta de Martha Stewart

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